Si tu mejor amigo peludo tiene el hábito de hacer pipí dentro de la casa, entonces te has visto en el dilema de tener que limpiar el desastre. El problema es que, a veces, el procedimiento no es el adecuado y lejos de evitar que ocurra nuevamente, invitamos a nuestro amigo a repetir la mala conducta.
¿Cómo puedo eliminar la pipí de mi perro y olor en la casa?
Es un error muy frecuente que, pensando en la desinfección, apliquemos cloro al sitio para eliminar cualquier rastro de gérmenes y también de olor. Sin embargo, pocas personas saben que la orina del perro tiene amoniaco y, por tanto, al usar productos que lo contienen, contribuimos a darle a nuestro amigo peludo una huella olfativa que seguir. Lo más probable es que repita la acción prácticamente en el mismo lugar que la vez anterior.
Seguramente, para ti lo más importante es eliminar la mancha, pero para nuestros amigos de 4 patas lo importante es el olor. Ellos no se guían por referencias visuales sino olfativas y, por ello, debes tener cuidado con los productos que elijas al momento de limpiar.
En general, los productos de limpieza comunes para el hogar están desaconsejados en el caso de las heces caninas. Un sustituto efectivo son los detergentes enzimáticos que puedes encontrar sin problemas en tiendas especializadas.
También es viable utilizar productos naturales como el bicarbonato de sodio y el vinagre, cuyo efecto positivo puede potenciarse si los usas combinados mezclados con agua.
Otra opción es mezclar limón y bicarbonato en dos tazas de agua. La acidez del limón, además de desinfectar, tiene propiedades que funcionan muy bien para eliminar los olores.
El bórax, de venta en la mayoría de los supermercados, también es efectivo para combatir las manchas y los olores. Se aplica en seco y, luego de permitirle actuar por al menos una hora, es necesario aspirar muy bien el área tratada.
¿Cómo evito que mi amigo de 4 patas orine por todas partes?
La mejor forma de evitar las malas conductas, que luego puedan convertirse en malos hábitos, consiste en un adecuado programa de entrenamiento que comience a temprana edad, cuando todavía es un cachorro.
Enseñarle a nuestro amigo los límites y las conductas que esperamos que siga es esencial para mantener una buena convivencia. Recuerda que la relación será por muchos años y que un buen comienzo, firme y claro, facilitará todo lo que venga en el futuro.
Si lo requieres, existen productos diseñados específicamente para ayudarte a eliminar de tu amigo peludo la mala conducta de orinar en cualquier parte. Estos productos están disponibles en las tiendas especializadas y han probado su eficacia; sin embargo, considéralas siempre un refuerzo. Jamás actuarán como sustituto de un buen entrenamiento.