Ya hemos establecido en notas anteriores que los perros pueden hacer cosas realmente extrañas, por ejemplo el hábito de sentarse sobre nuestros pies sólo porque sí, marcar territorio, entender varios idiomas, incluso prácticamente descifrar lo que estamos pensando sólo con echarnos un vistazo en el lenguaje corporal, pero de entre tantas cosas hay una que nos llama la atención particularmente y estamos seguros que ya has observado, se trata del hábito de dar vueltas sobre su propio eje antes de hacer algunas tareas cotidianas incluyendo girar antes de hacer popó… A más de uno nos ha pasado que tenemos que esperar a que se acomode nuestro mejor amigo peludo antes de recoger sus desechos.

Seguramente habrás visto a tu perro dar vueltas en círculos antes de acostarse mientras “acomoda” su cobija o cuando está demasiado emocionado antes de un paseo o con la visita de alguna persona en casa. Por si te habías preguntado de qué se trata todo esto, se cree que los perros giran instintivamente para acostarse, por ejemplo, para indicarle a otros miembros de la manada que ese pedazo de territorio en particular les pertenece, además de limpiar con este movimiento el terreno para evitar sentarse sobre un insecto y para acomodar la superficie sobre la que planean dormir.

Sabemos que los canes no fueron siempre animales domésticos, pese a que su historia con el ser humano se remonta a hace miles de años, sin embargo, algunos comportamientos propios de su etapa “salvaje” aún están presentes en su vida.

Por lo de girar antes de hacer popó, por mucho tiempo se tuvo la creencia de que este hábito era exclusivamente para hacer que el olor de sus heces se expandiera más lejos a manera de marcaje territorial, sin embargo, un estudio reciente conducido por los zoólogos, el  Dr. Pascal Malkemper y la Dra. Sabine Begall de la Universidad de Duisburg-Essen en Alemania, sugirió, después de analizar por cerca de 2 años un grupo de más de 37 razas de perros, que el hábito de girar antes de hacer popó en perros respondía a un fenómeno conocido como “magnetorecepción”, elemento gracias al cual algunas especies migratorias logran ubicarse de acuerdo al campo magnético de la tierra.

Así, se descubrió que los perros tienen una extraña preferencia por ubicarse de Norte a Sur cuando van a hacer popó, alineándose con el campo electromagnético de la tierra. También se descubrió que durante ciertos eventos magnéticos como tormentas solares o geomagnéticas, la orientación de los perros cambiaba de acuerdo al fenómeno en cuestión.

Por extraño que parezca y aunque todavía no se tiene una explicación exacta para conocer la razón de esta tendencia canina, parece que los perros y el campo magnético de la tierra están super conectados. Ya había escuchado que en el cono Sur de la tierra el agua del retrete gira al revés que en la región Norte… ¿Será que los perros argentinos giran hacia el lado opuesto? … Por lo que a nosotros respecta, ya sea Norte o Sur, recoger las heces es nuestro vital trabajo, así que si necesitas accesorios de limpieza de desechos, no dudes en visitar la boutique de Dog Dog en donde encontrarás las cosas más lindas para la higiene de tu mejor amigo peludo.