Somos muchos los que tenemos un amigo peludo al queremos resguardar del calor en primavera, cuando las temperaturas empiezan a aumentar. Por eso, hoy te contamos cómo puedes ayudarlo a sobrellevar las épocas más calurosas del año.
Hidratación y nutrición como primera medida
Es necesario que tenga agua disponible las 24 horas, para que esté bien hidratado. Ten cuidado con esto y no hagas que tenga que pedirla con ladridos. Mejor revisa a lo largo del día cuánta agua tiene disponible. Opcionalmente, puedes colocar más bebederos en casa, cerca de donde le gusta descansar.
Parece muy obvio, pero es importante evitar el error de darle de beber cualquier agua. Cuando hace mucho calor, el agua de grifo puede salir tibia o, incluso, caliente. No queremos que nuestro amigo se lleve una sorpresa desagradable.
Lo mejor es ofrecerle a tu perro agua previamente guardada en un lugar fresco, o bien añadir dos hielos al agua de llave. Se ha comprobado que el hielo no es perjudicial para su salud.
De hecho, algunos veterinarios suelen aconsejar preparar helados caseros. Por ejemplo, puedes hacerlos añadiendo galletas trituradas o fruta sobre una base de yogur natural bien frío.
Prepara un espacio agradable
Ya sabemos que no pueden hablar para decir lo que necesitan, pero de seguro sí agradecen las atenciones. Así que, no olvides prepararle a tu perro un espacio fresco, al resguardo del sol, donde pueda comer, jugar y hacer sus necesidades.
Si todavía tienes la cobija gruesa del invierno, necesitas cambiarla por una ligera. Ahora venden productos curiosos, como alfombras que se enfrían al sentir el peso de tu amigo peludo.
Dale atención especial, si es muy adulto. Tal vez lo dejas en la sombra, pero por su edad hay momentos en que quizá no pueda seguir caminando y quede tirado en pleno sol.
Cuida el cuerpo de tu perro
Nuestros amigos de cuatro patas tienen una cobija natural, su pelaje, que puede resultar molesta en tiempos de mucho calor, por lo que a veces es bueno realizarles un corte.
Es recomendable sacarlo a pasear en los momentos de menos calor. Sin embargo, si en algún momento durante la caminata lo ves agobiado o con la lengua afuera, puedes frotarle un poco de agua en la cabeza, tronco y vientre. El efecto reconfortante es rápido, si ya le habías cortado el exceso de pelaje.
Otra cosa importante que no debes olvidar es bañarlo más a menudo que durante las épocas frías del año.
Con estas recomendaciones ya sabes cómo refrescar a tu perro en los meses más calurosos de primavera y verano, solo aplica estos consejos, observa cómo te lo agradece alegremente y prepárate para disfrutar del calor junto a tu mejor amigo.