Una de las preocupaciones más grandes cuando se tiene un perrito con columna larga es precisamente que pueda lastimarla al subir o bajar de algún mueble. Personas que viven con Dachshund son advertidos constantemente del peligro de que estos se paren sobre sus patas traseras y las de las constantes vitaminas o alimento especial que deben consumir de por vida para fortalecer esa zona. Sin embargo, pocos saben a ciencia cierta con qué razas deben tener cuidado y qué actividades pueden ocasionar daños.

 

El bassetismo –de allí el nombre de los Basset Hound− es una mutación genética que hace a los canes tener patas cortas en relación con el tamaño del cuerpo, en este caso una columna alargada; es decir, enanismo. Algunas razas que poseen esta característica son: Dachshund, Basset Hound, Corgi, Bulldog francés, Beagle y, claro, nuestros queridos mestizos.  Aunque pareciera lógica su incapacidad de subirse a los muebles debido a su tamaño en algunos casos, hay otros que al ser ligeros lo hacen aún no siendo recomendable.

Comúnmente se les advierte a los humanos evitar que los perros de las razas mencionadas suban o bajen escaleras, trepen muebles, brinquen sobre sus patas traseras o hagan movimientos bruscos. También se les recomienda no hacer actividades deportivas intensas y cuidar su peso ya que este propicia la aparición de padecimientos. Entre estos se pueden nombrar –yendo de los más débiles a los más peligrosos− las molestias al caminar, orinar o defecar, dolores al moverse, hernias discales y parálisis de una o varias extremidades.

Aunque algunos síntomas parecieran obvios, cada perro es diferente y su comportamiento y reacción ante cada molestia puede variar. Sin embargo, los médicos veterinarios aconsejan poner especial atención en su forma de caminar (si cojea o lo hace de forma rígida), en posibles chillidos cuando se sienta o se levanta o si tiembla sin tener una causa aparente. En cualquiera de los casos anteriores se recomienda ir con un especialista quien podrá verificar su estado palpando las vértebras o de ser necesario solicitará una radiografía.

Dependiendo la gravedad de la lesión será la solución. El tratamiento más común son los corticoides para desinflamar la zona y así evitar que las vértebras choquen entre sí. Los casos más extremos requieren una cirugía y en la mayoría de los casos tiene excelentes resultados; sin embargo, como cualquier operación en la columna, conlleva riesgos. Para evitar llegar a estar consecuencias es importante cuidar de nuestros amigos de columnas alargadas con una buena alimentación, vitaminas recomendadas por su médico veterinario y rutinas de caminatas.

Lo último podría parecer contraproducente si se tiene la idea de que una caminata o ejercicio conlleva sacarlo a correr al parque. Es un buen momento para aclarar este aspecto: muchas personas llevan a su can a entrenar con ellos y correr varios kilómetros, lo cual está bien para ciertas razas pero no para aquellas que tienen bassetismo. Sus patas cortas y columna alargada no lo hacen resistente para largas carreras, pero sí para caminatas, con las cuales fortalecen su espalda. También procura usar un collar o arnés adecuado según su peso, tamaño o comportamientos en exteriores.

Ivonne Nayeli Hernández Huerta

Lic. en Comunicación y periodista.

Reseñista de cine, reportera y amante de los perros.