Para aquellos momentos en los que quieres poner a trabajar física y mentalmente a tu perro te recomendamos el juego de “busca” y claro: ¡Encuentra!

El primer paso es elegir el objetivo que debe encontrar tu perro. Te recomendamos que sean sus mismas croquetas, sin embargo si éstas no llaman mucho su atención puedes usar premios más apetitosos, por ejemplo galletas, salchicha de pavo o manzana.

Una vez que elegiste el objetivo (“target”) a encontrar, ahora tienes que definir el lugar donde empezarás a enseñar el comando “busca” a tu perro. Lo ideal es comenzar en un sitio con pocos distractores, por ejemplo dentro de tu casa en una zona despejada de muebles.

Ahora guarda a tu perro en otra área, él no debe ver nada de lo que harás a continuación. Comenzarás delimitando la zona de trabajo, visualízala o de preferencia dibújala con cinta adhesiva. Empieza por marcar un cuadro de cinco pasos por lado (1 metro cuadrado aproximadamente). Para delimitar mejor el área pisa las líneas que marcarán el “cuadro de olor” en el que empezarás a trabajar con tu perro. Sobre esas mismas líneas coloca los premios (el target), también debes poner algunos bocadillos más dentro del cuadro, pero nunca fuera de éste.

Lleva a tu perro hacia el cuadro de olor, condúcelo con una correa larga que le dé la oportunidad de moverse libremente, al momento de llevarlo pega tu puño a su boca y nariz. Dentro del puño debes tener una porción de los premios que colocaste en el cuadro de olor.

Mientras tu perro huele tu puño vele soltando algunos premios y llévalo paulatinamente a la zona del cuadro de olor.

Ya que llegaste al cuadro de olor, con tu misma mano llévalo hasta el piso y comienza a decirle “busca, busca”. Díselo amablemente, sé paciente y no lo regañes si se equivoca. Solo guíalo nuevamente.

Repite este ejercicio hasta que veas que lo comprende. Cuando lo haga, entonces haz el mismo procedimiento en un lugar con pasto.

Sigue practicando esta dinámica hasta que tu perro la domine, después puedes ir cambiando los lugares de trabajo e ir ampliando el cuadro de olor. Mientras más grande sea el cuadro, mayor reto representará para él. Pero recuerda avanzar de acuerdo a los progresos de tu perro, no lo presiones ni exijas de más.

Cuéntanos, ¿Te fue de utilidad esta información? ¿Te gustaría ser un experto en este ejercicio?

Autor: Lina Palafox